Infusiones adelgazantes después de comer es una excelente forma de acabar con los molestos gases y tener el vientre más plano. Están especialmente indicadas para facilitar las digestiones y que te hará sentir más ligero. Se trata de la infusión de manzanilla y anís.
La infusión de manzanilla tiene la capacidad de reducir la inflamación de las mucosas del estómago y facilitar la digestión, luego de las comidas
El anís es el complemento ideal para la infusión de manzanilla. Ambos forman la pareja perfecta para tratar los problemas de estómago y las digestiones pesadas.
Infusiones milagrosas
Preparar la infusión de manzanilla y anís para reducir abdomen es muy sencillo. Necesitas una cucharada de flores de manzanilla, una estrella de anís y un vaso de agua. Pon todos los ingredientes en una cazuela al fuego y deja que hierva. Después tapa la cazuela durante 5 minutos y deja que repose. Pasado este tiempo cuela la mezcla y ya tendrás lista la tisana.
El mejor momento del día para tomar la infusión de manzanilla y anís para bajar la barriga es después de las principales comidas. De esta forma, su acción facilitará la digestión y evitará la formación de flatulencias que pueden inflar tu estómago y aumentar su volumen.
Si te ha gustado la infusión de manzanilla y anís para bajar de peso seguramente también te interesen otras tisanas digestivas y adelgazantes que te harán lucir un vientre más plano. Hay muchas y variadas por lo que puedes ir probando con varias hasta que encuentres la que mejor se adapte a tus necesidades. Puedes probar con el té rojo, ideal para quemar grasas y reducir el vientre. Otra buena opción es tomar un té de hinojo, especialmente efectivo para evitar los gases.
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