Recientemente es ya frecuente leer y oír esta frase. ¿Es eso cierto? En primer lugar, el petróleo y su asociado hidrocarburo, el gas natural, tanto en Venezuela como mundialmente, ahora más abundante que nunca y la tecnología ha hecho que esté en cada vez mayor cantidad, bajo costo y accesible a toda la humanidad. Lo que sucede es que el globo terráqueo ha venido incrementando su temperatura promedio de manera ininterrumpida desde la revolución industrial a finales del siglo 18. Al petróleo y al gas natural junto con el carbón, se les considera como responsables. Este aumento ha resultado en el incremento del nivel del mar.
Es un tema apasionante donde están ingresando en su debate muchos intelectuales sin formación cuantitativa para determinar que el problema NO se resuelve excluyendo unas energías y concentrándose en otras que de paso son intermitentes. En su lugar las mentes más despiertas hablan de que se va a requerir sumar a ambas, las fósiles y las renovables. Obvio que las fósiles dentro del buen margen económico que disfrutan, deben incluir su adecuación al ambiente.