Ya casi está aquí: el Mundial de Fútbol comienza en menos de 100 días y Qatar será anfitrión de la primera edición de la copa en Oriente Medio, la segunda de Asia tras el de Corea-Japón 2002.
El pequeño emirato aprovechará el evento para promocionar turísticamente su país, que gracias a la abundancia de petróleo en sus desiertos han sido un imán para las finanzas y las obras de gran envergadura, desde museos a rascacielos.
Pero también hay un país con propuestas de turismo aventura y de rincones tradicionales para descubrir, donde los turistas que lleguen para la Copa podrán aprovechar que los transportes públicos serán gratuitos.
Agua, desierto y atracciones
Por ejemplo, para aprovechar las aguas del Golfo Pérsico y las cercanías del gigantesco proyecto inmobiliario The Pearl-Qatar se puede navegar en kayak o paddle board a dar vueltas en motos de agua; mientras que otro mar pero de dunas, el Khor Al-Adaid, se pueden explorar en excursiones en 4×4 a una hora y media de la capital Doha, acompañadas de paseos en camello.
Las playas de Fuwairit son una de las mecas para el kite surf, gracias a sus inmensos arenales y sus fuertes vientos
Para quienes busquen algo con más emoción, el Doha Quest es el último parque de atracciones abierto en esta ciudad, donde se encuentran dos récords Guinness: la montaña rusa cubierta más alta del planeta y la torre de caída cubierta de mayor altitud. Si sufre de vértigo, mejor ni acercarse.
Playas y paseos
Claro que también están las opciones de las playas. Para ver el atardecer, en Turismo de Qatar recomiendan ir Al Shamal en la costa norte, o si se animan al kite surf, los vientos soplan fuertes en los inmensos arenales de Fuwairit, no muy lejos.
Más familiar es el programa del Hilton Salwa Beach Resort & Villas con sus 3,5 km de playas de arena fina, mientras que el Parque Acuático y de Aventura Desert Falls, en la misma zona, ofrece 25 toboganes de agua para combinar la frescura con la diversión.
Desde Doha parten excursiones para ver delfines por el golfo o al Banana Island Resort Doha by Anantara, paseos que se pueden combinar con avistamientos de tiburones ballena.
Proyectos en marcha
Hay varios proyectos de gran envergadura para el turismo, aunque no llegarán a tiempo para el Mundial de Fútbol.
Dos son parques de atracciones: el de Lusail Winter Wonderland, con 50 montañas rusas y carruseles giratorios; y el de Qetaifan Island North, complejo de 130 hectáreas con toboganes de agua, hoteles, tienda de lujo y playas.
Y hablando de playas, el proyecto West Bay North Beach, cerca del centro de Doha, aspira a urbanizar seis arenales costeros rodeados de hoteles de alta categoría flanqueados por dos kilómetros de vías peatonales y bicisendas.
Museos y mercados
No todo es playa y aventuras. La capital tiene varios museos de reciente creación, donde la cultura se fusiona con la arquitectura de vanguardia.
Entre ellos están el Museo Nacional de Qatar que presenta un diseño que recuerda a una flor del desierto y el de Arte Islámico que fue ideado por el arquitecto chino I.M. Pei -responsable de las pirámides del Louvre- y el nuevo Museo Olímpico y Deportivo de Qatar 3-2-1, que aprovechará el tirón de la Copa de Fútbol.
Los nuevos museos como el Nacional de Qatar, el de Arte Islámico y el Olímpico y Deportivo presentan una audaz arquitectura de vanguardia
En el desierto, en las formaciones rocosas de Ras Abrouq (cerca de Zekreet) se encuentra una extraña obra de arte de Richard Serra: East-West/West-East son cuatro grandes placas de acero de 14 metros que parecen no encajar demasiado con el agreste paisaje.
Otra forma más tradicional de conocer el espíritu catarí es pasar por el mercado de Souq Waqif, donde el comercio y regateo de los artesanos, los puestos de comida y otros personajes locales cobran más vida al atardecer.
Centros comerciales y marinas
En Doha hay zonas que destilan lujo por donde se camine, pero su visita no implica gasto alguno excepto algún transporte, como es la isla artificial de The Pearl, donde los megayates están aparcados en un paseo marítimo lleno de sofisticadas tiendas boutique y restaurantes de alta gama.
Leer más: Los arquitectos españoles que lideran la revolución deportiva de Qatar
Más modesto, pero igual de interesante es la zona de Msheireb, en el centro de Doha, con sus cafés de moda, galerías de arte y museos.
Los que estén dispuestos a quemar su tarjeta de crédito pueden pasear por los fastuosos centros comerciales como el Mall of Qatar y el Doha Festival City, y ni hablar de las lujosas Galerías Lafayette con sus pasarelas exteriores climatizadas, y el nuevo Place Vendome, con un canal al aire libre y una estética que imita a las calles de París.
Con información de Tendencias Hoy
Lea también: ¡Toma nota! Así es el código de vestimenta en Qatar