España y Suecia empataron sin goles en su debut en la Eurocopa, tras una semana marcada por el covid-19, que golpeó a ambas selecciones y llenó de incertidumbre el encuentro en Sevilla. Las dos principales favoritas del grupo E, en el que también están Polonia y Eslovaquia, no se sacaron diferencia.
La primera mitad tuvo al seleccionado de Luis Enrique como protagonista casi exclusivo del dominio de la pelota y de las acciones. Con un juego de transiciones largas y poca dinámica, La Roja se adueñó de la tenencia y generó un puñado de situaciones muy claras que no terminaron en gol por las imprecisiones de sus definidores.
Dani Olmo, de cabeza, tuvo la primera en un centro frontal desde la derecha, pero el arquero Robin Olsen reaccionó de manera espectacular al tiro de pique al suelo que envió al córner. Un rato más tarde fue Koke por izquierda, luego de una fructífera asociación con Jordi Alba, el que perdió la oportunidad con un puntazo que se fue ancho.
Sin duda, la más clara del juego quedó en los pies de Álvaro Morata, cuando ya se había jugado más de media hora y el central Marcus Danielson le erró a un despeje dejando al delantero cara a cara con el arquero. El jugador de última campaña en la Juventus se acomodó para su pierna hábil y desde adentro del área, en lo que parecía un penal en movimiento, sacó un tiro que se fue afuera, a casi un metro del segundo palo.
Suecia tuvo su única oportunidad sobre los 40 minutos, en un saque de arco que de manera insólita dejó desacomodada a la defensa de España. Alexsander Isak se metió en el área por el sector derecho del frente de ataque, logró llevarse el balón tras trabar con su marcador, amagó para generarse el hueco de disparo y desenfundó u remate cruzado que dejó clavado a Unai Simón. Sin embargo, allí pareció Marco Llorente sobre la línea para despejar el esférico que por el efecto que llevaba terminó dando en el palo, tras el rechace, y cayó en las manos del arquero Simón.
Así, la primera mitad culminó con varias emociones, pero sin cambios en el tanteador.
En el complemento, la tónica del juego no cambió, pero esta vez a España le costó más encontrar espacios ante una Suecia replegada totalmente por momento con ocho futbolistas dentro del área. Por eso, Luis Enrique buscó con Sarabia y Thiago darle mayor dinámica al ataque, sobre todo con la salida de Morata y la decisión de jugar sin un centrodelantero clásico. Estas modificaciones no dieron el efecto deseado y poco después entraron Gerard Moreno y Oyarzabal, para intentar así un ataque más punzante.
Pero la más clara fue para el combinado escandinavo, ante una fantástica maniobra individual de Isak en el área que dejó tres hombres en el camino a puta gambeta y lanzó un buscapié para Berg, que esperaba sólo en el otro palo. Sin embargo, el grandote falló de forma insólita en el área chica y tiró el balón por arriba del travesaño, cuando estaba a metros de la línea y sin resistencia.
Sobre el final, en tiempo de descuento, Gerard Moreno cabeceó un centro perfecto de Sarabia desde la derecha y Olsen se lució con una compleja tapada abajo con el pie izquierdo para salvar a su selección una vez más. Justamente fue Sarabia quien tres minutos después tuvo una oportunidad inmejorable ante un desborde de Alba, una de las figuras del encuentro, pero el futbolista del PSG quiso controlar la pelota en el centro y se la terminó obsequiando al arquero con su control largo.
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