Con miras a consolidar la victoria perfecta el 28 de julio, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) en Monagas realizó un encuentro con el diputado Nicolás Maduro Guerra, responsable nacional de Asuntos Religiosos del partido, y pastores y ministros de diferentes iglesias cristianas.
En la entidad se han conformado hasta el momento 1.655 grupos «Amigos de Nicolás» en comunidades cristianas de los 13 municipios, en el marco de una cruzada que busca motivar a los fieles a la participación masiva en el venidero proceso electoral.
El gobernador Ernesto Luna aprovechó para agradecer el trabajo de las iglesias de diferentes corrientes religiosas en Monagas que, a través del evangelio, han contribuido a que el pueblo sea resiliente ante las consecuencias de las sanciones impuestas por el gobierno de Estados Unidos.
«Es tiempo de ser misioneros de la esperanza. Con el favor de Dios los tiempos mejores están llegando. Y en los tiempos adversos hemos contado con la conducción certera del presidente Nicolás Maduro Moros, quien ha abrazado a la familia venezolana. Nosotros hoy debemos ser multiplicadores de ese mensaje y seguir preservando la paz de Venezuela», expresó el mandatario.
Maduro representa la paz
Luna envió un mensaje conciliador y lleno de esperanza a las iglesias católicas y evangélicas. También agradeció a los pastores el constante servicio que realizan para fortalecer la fe y llevar sosiego a la población en tiempos de ataques.
«Seguiremos caminando por el sendero de la fe en Dios, el trabajo y la esperanza para el servicio del pueblo. Somos instrumentos de Dios desde cada uno de nuestros espacios para generar soluciones y propuestas en favor de la paz y de la familia», expresó.
A su vez, Maduro Guerra agradeció el trabajo de Yraida «La Yaya» Arismendi en Monagas al frente de la Comisión de Asuntos Religiosos del PSUV, porque ha logrado cohesionar una gran fuerza de fe en 13 municipios y 44 parroquias de la entidad, rumbo al triunfo del presidente Nicolás Maduro el 28 de julio.
Comentó que la misión es afianzar la fe y los valores a nivel nacional para el fortalecimiento de la familia como núcleo fundamental de la sociedad.
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