El Ejército colombiano denunció que el frente Darío Gutiérrez, una disidencia de las extintas FARC, quemó un vehículo en el que se transportaban 18 militares de desminado humanitario a los que les robaron detectores de minas y prendas de protección, en el departamento del Huila.
El ataque contra los 16 soldados y dos suboficiales ocurrió cuando el grupo se dirigía al caserío Río Blanco y hombres armados «bajo amenazas y de forma violenta, detuvieron el vehículo e hicieron descender al personal militar».
El comunicado del comando de la Brigada de Ingenieros de Desminado Humanitario del Ejército añadió que por su labor la tropa «no portaba armamento» pero que sin embargo los atacantes robaron equipos de comunicaciones y de protección, detectores e «incineraron el vehículo en el que se movilizaban».
Para el Ejército, este tipo de hechos terroristas «violan los derechos humanos y las disposiciones del derecho internacional humanitario”.
Igualmente culpan del ataque al frente «Darío Gutiérrez», que «delinque en esta región del país, y sus acciones criminales no sólo ponen en peligro la vida e integridad de la población y los desminadores, sino que podría interrumpir la continuidad de las operaciones de desminado humanitario».
Las unidades militares que tienen jurisdicción en este departamento, desplegaron operaciones con el propósito de garantizar la seguridad de los pobladores.
El frente «Darío Gutiérrez» forma parte presuntamente del Estado Mayor Central (EMC), la principal disidencia de las FARC, que el fin de semana amenazó a candidatos a las elecciones locales de octubre y a políticos, tras la ruptura del cese al fuego con el Gobierno colombiano.
Lea también:
Incendio destruye otro dormitorio femenino de estudiantes en Guyana