Al menos catorce personas han muerto y cinco están desaparecidas por las inundaciones en varias de las provincias de Turquía que el pasado 6 de febrero quedaron arrasadas por dos sismos que dejaron más de 48.000 muertos, y donde han quedado ahora anegados campamentos donde se refugiaban víctimas de los terremotos.
El ministro del Interior turco, Süleyman Soylu, informó de que en la provincia de Adiyaman murieron dos personas y otras dos están desaparecidas después de que las fuertes lluvias provocaran una avenida de agua que arrastró una casa prefabricada en la que se alojaba una familia que perdió su vivienda durante los sismos.
La oficina del gobernador de Sanliurfa, otra de las once regiones afectadas por los terremotos, señaló que se han localizado los cadáveres de cuatro personas que fueron arrastradas por el agua hasta un paso bajo nivel.
Horas más tarde se localizaron en el sótano de una casa de Sanliurfa otros cinco cadáveres, que fueron identificados como refugiados sirios, y se encontró un coche con otras dos personas ahogadas.
También en una zona rural de la provincia murió una persona, con lo que sube a doce el saldo de muertos en Sanliurfa, confirmó Soylu, con un balance momentáneo de catorce fallecidos en la región y cinco personas aún desaparecidas.
Dos bomberos que habían desaparecido fueron finalmente localizados con vida, pero sigue en estado grave un hombre que fue alcanzada por un rayo mientras conducía su tractor en el campo.
En la ciudad de Sanliurfa, las fuertes precipitaciones que comenzaron la pasada noche han anegado las calles y el agua ha arrastrado vehículos e inundado negocios y viviendas.
Un centro médico tuvo que evacuar a los pacientes ingresados a las plantas superiores del edificio, y los colegios han suspendido las clases.
En la provincia de Malatya, también afectada por los terremotos, varios campamentos de tiendas de campaña donde se refugian víctimas de los seísmos, han quedado inundados debido a las lluvias, informó la emisora HalkTV.
El pronóstico meteorológico indicó que las lluvias continuarán en la zona y advierten de la posibilidad de que las inundaciones afecten también a Diyarbakir, otra de las provincias damnificadas por los seísmos que han dejado a miles de personas sin vivienda.
Lea también:
Más del 70 % de los salvadoreños apoyan la reelección de Nayib Bukele