Autobuseros de diferentes rutas del transporte público de Maturín, deben madrugar o en su defecto, pasar la noche en las diferentes estaciones de gasolina para poder acceder al cupo para abastecer sus unidades colectivas.
Hay quienes se van desde las nueve o diez de la noche, otros lo hacen más tarde, pero todos con la idea de poder salir temprano para poder trabajar y llevar el sustento a sus hogares, para ello, la otra opción es, acudir a tempranas horas hasta la gasolinera, guardar el cupo, volver a la ruta para hacer al menos dos vueltas antes de reingresar a las enormes colas que se forman en la estación de servicio El Parque.
Amanecen en las colas
«La única manera de salir temprano es así, yéndome a las diez de la noche para salir lo más temprano posible, quedan pocas estaciones subsidiadas y las colas son enormes, sin uno no se va temprano pierde el día prácticamente», dijo Morris González, de la ruta 41.
Por su parte, Leonardo Zapata, conductor de la ruta 47, mencionó que antes de que se diera el problema de desabastecimiento de gasolina, hacía hasta ocho vueltas al día, «de ocho de la mañana hasta las seis de la tarde podía hacer hasta ocho vueltas, porque podía llenar el tanque después de la jornada de manera tranquila».
Pierden tiempo y dinero
Acotó que la nueva modalidad ha conllevado a mermar la ganancia, debido a que además del gasto que genera la unidad, debe cancelar al conductor 40 bolívares diarios y debe hacer al menos siete vueltas, «hay días que se hace y otros que no, también depende de las rutas, esto de venir a surtir gasolina y permanecer tantas horas en la cola hace que perdamos parte de la ganancia, eso debería influir en el costo de pasaje, sin embargo, el flujo de pasajeros se mantiene», dijo Zapata.
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