Las autoridades de Ucrania anunciaron que este miércoles no podrán abrir ningún corredor humanitario para evacuar civiles y suministrar productos básicos debido a los bloqueos y los ataques de las tropas rusas.
La viceprimera ministra ucraniana, Iryna Vereshchuk, aseguró que «desafortunadamente» estos corredores humanitarios, que comenzaron a funcionar de forma desigual pocos días después de la invasión rusa, «no pueden abrirse hoy».
En la región de Zaporiyia, en el sur de Ucrania, «los ocupantes (rusos) bloquearon los autobuses de evacuación y en la región de Lugansk (este) están violando el alto al fuego», explicó Vereshchuk en su canal de Telegram.
Zaporiyia es el punto al que se dirigen habitualmente los refugiados que abandonan la sitiada y casi destruída ciudad portuaria de Mariúpol, que permanece bajo asedio ruso desde el comienzo de la guerra.
Lugansk, una región prorrusa autoproclamada república independiente y reconocida por Moscú, se convirtió recientemente en uno de los objetivos principales de las fuerzas rusas.
«Los ocupantes no solo ignoran las normas del derecho internacional humanitario, sino que tampoco pueden controlar adecuadamente a su población sobre el terreno», agregó la viceprimera ministra.
Corredores humanitarios blancos de ataque
Recientemente, en la ciudad de Kramatorsk, en el este de Ucrania, hubo un ataque a una estación de tren utilizada para evacuaciones. El ataque dejó un saldo de más de 50 muertos y fue atribuido a las tropas rusas.
«Todo esto crea tal nivel de peligrosidad en las rutas que hoy nos vemos obligados a abstenernos de abrir corredores humanitarios», dijo Vereshchuk. Agregó que las autoridades ucranianas trabajan para abrir los corredores «lo antes posible”.
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