Más de 500 vecinos de la calle Azcúe, de Maturín, se encuentran afectados por la escasez de agua, por lo que deben caminar kilómetros para surtirse del recurso hídrico. Los afectados señalan que llevan más de 45 días sin ver salir ni una gota de agua de las tuberías, por lo que decidieron salir y cerrar la calle con sus todos vacíos, y pancartas alusivas al tema.
Aseguran que ya han enviado varios oficios a la presidenta de Aguas de Monagas, Darquis Barreto, solicitando una solución al problema, pero hasta los momentos no han recibido respuesta alguna.
«Tenemos que ir caminando hasta el sector Alberto Ravell para poder cargar agua, eso lo hacemos desde las 5:00 de la madrugada hasta las 6:00 de la tarde, simplemente porque necesitamos el recurso hídrico para cocinar, lavar, limpiar y para bañar a nuestros abuelos porque muchos presentan alguna condicón o patología», expresó el vecino José Vicente Arrioja.
Vecinos pagan en dólares a camiones cisternas
Entre 5 a 10 dólares es lo que pagan los vecinos de la calle Azcúe de Maturín, a los camiones cisternas para que les llenen sus tobos y así ahorrarse ir hasta el sector Alberto Ravell a cargar el agua.
En este sentido, la vecina Marta Mariño, destacó que su esposo sufre de una enfermedad, por lo que debe tener una bolsa clínica pegada a él para poder orinar, situación que complica aún más el problema, ya que debe asearlo de manera permanente.
«No sabemos qué está pasando, porque tenemos 45 días sin el agua, las autoridades no se pronuncian en cuanto al tema, ¿qué pasó con el dinero que supuestamente, invirtieron en la planta del Bajo Guarapiche?», se preguntó la vecina Marta Mariño.
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