Al menos veinte palestinos, entre ellos nueve niños, murieron este lunes en la Franja de Gaza y 65 resultaron heridos en plena escalada de violencia con Israel, que incluyó el disparo masivo de cohetes desde el enclave, que hicieron sonar las alarmas en una tensa Jerusalén.
El Ejército israelí bombardeó en respuesta en la Franja, aunque no pudo asegurar que todos los fallecidos fueran por estos ataques. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, advirtió que los disparos palestinos cruzaron una «línea roja», mientras seguían sonando las alarmas antiaéras en distintas partes de Israel.
Como se preveía, en la franja de Gaza y tras semanas de disturbios en Jerusalén, este lunes la Ciudad Santa amaneció con alta tensión y la irrupción de la Policía israelí en la Explanada de las Mezquitas, que dejó más de 300 heridos en enfrentamientos.
Las escaramuzas en la Puerta de Damasco, una de las principales entradas en la ciudad amurallada, comenzaron también desde la mañana de este lunes cuando decenas de palestinos se congregaron para impedir el paso de una marcha ultranacionalista judía por Jerusalén Este ocupado.
Conflicto recrudece en Gaza
El brazo armado de Hamás disparó siete proyectiles, seis de ellos dirigidos a Jerusalén, de los que cuales uno fue interceptado, otro cayó en una casa a las afueras de la ciudad y el resto en áreas despobladas. Las explosiones se escucharon en toda la ciudad.
Milicias palestinas se unieron al lanzamiento y durante toda la tarde se registraron más de 50 disparos, sobre todo contra las comunidades israelíes colindantes con la Franja.
Además, el grupo islamista Yihad Islámica Palestina se atribuyó el lanzamiento de un misil antitanque contra un vehículo israelí, que hirió levemente a un civil.
Cisjordania y comunidades árabes de Israel también han celebrado protestas en apoyo a las revueltas en Jerusalén.
Lea también:
Covid-19 en Venezuela: Monagas sin casos este lunes 10 de mayo de 2021