El presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, se presentó este sábado ante el tribunal que debe determinar si se prorroga o no el arresto del exmandatario. El mismo fue detenido por la oficina nacional anticorrupción debido a su breve declaración sobre la ley marcial.
El automóvil que llevaba a Yoon salió poco antes de la 1:30 p.m. hora local (4:30 GMT) del Centro de Detención de Seúl, ubicado en Uiwang, donde se encontraba, y alcanzó su destino media hora más tarde. Fue escoltado por una comitiva de vehículos de seguridad que fueron agitados por las multitudes que se congregaron en el trayecto, según informó en directo la agencia de noticias Yonhap.
Yoon expuso durante aproximadamente 40 minutos sus argumentos sobre la validez de la declaración del estado de excepción que realizó el 3 de diciembre, ante el Tribunal del Distrito Oeste de Seúl. Esta decisión le llevó a ser destituido once días después, según reportó el medio mencionado.
Tanto la parte acusadora como el equipo jurídico del presidente dedicaron 70 minutos cada uno a exponer sus argumentos.
El tribunal finalizó la audiencia después de aproximadamente cinco horas de escuchar los argumentos de ambas partes. Mientras que afuera se reunían más de 12,000 seguidores del presidente Yoon, gritando su nombre y agitando banderas de Corea del Sur y Estados Unidos. Algunos se pusieron a llorar, mientras que otros tuvieron pequeños enfrentamientos con la policía.
Se experimentaron instantes de creciente tensión cuando los manifestantes intentaban forzar la entrada al recinto del tribunal. Los cuales exigían a gritos que abrieran las puertas para poder ver al presidente.
El presidente explicó y respondió fielmente sobre los hechos, las pruebas y las cuestiones jurídicas», dijo su abogado, Yun Gap-geun, a los periodistas apostados en la entrada del tribunal. «Esperaremos tranquilamente hasta que se conozca la decisión», señaló.
Presidente surcoreano sigue detenido
Yoon fue detenido el miércoles pasado después de un prolongado asedio a su hogar por parte de las autoridades. Ahora, el tribunal debe determinar si prorrogar el período inicial de 48 horas de su detención. El cual ha sido interrumpido en varias ocasiones debido a los intentos de su defensa de obstaculizar los procedimientos en su contra.
Se espera que el tribunal emita una decisión sobre el asunto, ya sea esta noche o a primera hora del domingo.
Si la solicitud es aprobada, la detención de Yoon podría prolongarse hasta 20 días. En caso de ser denegada, se anticipa que regrese a su hogar para continuar con la preparación de su defensa.
La Oficina para los Casos de Corrupción de Altos Funcionarios (CIO) presentó la solicitud para extender la detención de Yoon el día anterior. Este organismo está llevando a cabo una investigación en conjunto con la Policía y el Ministerio de Defensa para determinar si su declaración de ley marcial.La misma podría considerarse un intento de insurrección, el único delito por el cual un presidente surcoreano no goza de inmunidad.
Yoon, quien se convirtió en el primer presidente surcoreano en ser arrestado mientras ocupaba el cargo (a pesar de haber sido suspendido de sus funciones debido a su destitución). También había solicitado la anulación de su orden de detención, la cual fue denegada.
Simultáneamente a esta investigación penal, el Tribunal Constitucional de Corea del Sur está llevando a cabo otro proceso. Este para determinar, antes de mediados de junio del próximo año, si se confirma la destitución de Yoon o si se le devuelve a sus funciones.
El presidente, quien fue interrogado durante más de diez horas por la CIO el día de su detención. En ese tiempo se negó a presentarse en las dos sesiones de interrogatorio siguientes. Argumentó razones de salud y que ya había expuesto su posición de manera suficiente. Hasta el momento, tampoco ha asistido al Constitucional.
Yoon argumenta que la declaración de la ley marcial fue «un ejercicio de la autoridad presidencial» y no un delito.
EFE
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