Este miércoles 14 de febrero está reservado por la iglesia católica para dar inicio al tiempo de cuaresma, que es el significado de cuarentena, y se refiere a los cuarenta días que pasó Jesús en el desierto antes de ser tentado por el demonio, lo que marcó el inicio de su misión.
Se trata de una etapa de purificación para retomar una nueva vida que se refleja en la pascua del Señor, es decir, el paso.
En la antigüedad se ejercía esta práctica por parte de quienes «pagaban» penitencia, vistiéndose de saco y de sayal, y rociándose cenizas en la cabeza, posteriormente, con Jesucristo cobra significado católico y se usaba la ceniza como señal de penitencia, la cual más de 400 años después, la Iglesia católica integra este acto penitencial de manera oficial hacia el siglo XI.
Señal preparatoria
Era una señal preparatoria para poder acceder al sacramento de la confesión, y es una señal del dolor de haber pecado, según explica el padre Samuel.
Luego de haber sido sometida al fuego, queda la ceniza que luego será bendecida por el sacerdote, quien la coloca en la frente del penitente que busca purificarse de todo lo que no debe estar en el corazón del hombre, diciendo la fórmula: «Recuerda que polvo eres y polvo te convertirás» o «Conviértete y cree en el Evangelio».
Para obtener la ceniza, se utilizan las palmas restantes del año anterior. Toda persona que desee puede recibir la ceniza como señal de unidad. La iglesia catedral Nuestra Señora del Carmen ofició la primera misa en horas de la mañana, con los sacerdotes Samael Gamboa y José Echezuría, en horas de la tarde se realizó la segunda misa con el obispo de la Diócesis Enrique Pérez Lavado.
De igual manera, se ofició misa en las iglesias Santa Cruz, Santo Domingo de Guzmán de Las Cocuizas, a las 5:00pm.
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