Aunque en lo que va del año se han reunido en dos oportunidades delegaciones del presidente Joe Biden, con el mandatario Nicolás Maduro, nuestras fuentes desde aquí mismo de Washington, Estados Unidos donde me encuentro en el momento de redactar esta columna, aseguran que actualmente hay retrasos en las conversaciones entre ambas administraciones.
Señalan que los grupos opuestos, en EEUU, a la apertura con Venezuela, tratan de colocar condiciones al país.
No obstante, según los datos obtenidos, no hay información de que el presidente Biden detenga este proceso.
¿Para cuándo?
Supimos que las relaciones probablemente no se establecerán sino para el primer semestre del próximo año.
Con lo cual, la apertura de la representación consular tardará hasta el segundo semestre del 2023, a pesar de la destacada labor hecha para Washington y Caracas, del embajador James Story.
Maduro ha cedido poco
Ampliando la Información, sabemos que los republicanos y algunos funcionarios expertos en el tema razonan que el presidente Maduro ha cedido poco en las negociaciones.
Sobre todo, estiman los grupos opositores en Washington a una apertura con Venezuela, que el mandatario nacional ha consentido poco, con los estadounidenses detenidos, precisamente por tema de Citgo.
Los “rehenes de Citgo”
El caso de los “rehenes”, como los llama Estados Unidos, es una cuestión de principios y muy sensible en la política exterior de EE.UU.
Demora en el diálogo
Por otro lado, el retraso también se debe a la lentitud en la reanudación de las conversaciones con la oposición, precisamente por la resistencia de este sector de que el proceso se desarrolle en Venezuela y el retraso de las conversaciones con Washington.
A ello se suma también la posición de Maduro con los problemas con Washington que no avanzan.
Hemos podido ratificar que la política del presidente Biden se basa en “integrar a Venezuela al sistema hemisférico y sus normas, lo cual abrirá la estrategia de Washington que persigue las condiciones políticas, electorales y económicas en el país”.
Los vuelos y Chevron tendrán que esperar
Como consecuencia de todo esto, el reinicio de los vuelos directos entre ambos países, aprobados en principio, también se demorarían para el primer semestre del próximo año.
Asimismo, en el área petrolera, también hay un efecto, puesto que habrá un ligero retraso para la autorización de Washington, por los puntos que faltan por concretar con Chevron, para su integración completa a los negocios con Pdvsa.
Por lo tanto, también se retarda para el próximo trimestre, el acuerdo de la primera y segunda reunión en Caracas con los representantes de Biden, de suministrar 500 mil barriles diarios de crudo.
Así que todo esto motiva tardanzas en el comienzo de las operaciones y los permisos para las 10 compañías internacionales, además de Chevron, que producirían esta cantidad de barriles antes de marzo del 2023.
Lo que sí confirmamos confidencialmente y se los brindo desde aquí del DC la capital de las políticas, que una nueva delegación del presidente Biden visitaría el país en las próximas semanas, con la cual se conversaría todos estos temas y sus dilaciones.
Lea también:
Opinión pública y estimaciones de la recuperación económica