La Vinotinto Sub-21 se quedó a las puertas del título. El conjunto dirigido por el «Bocha» Batista cayó este domingo 2-1 contra Francia en la final del Torneo Maurice Revello, en el que los criollos arrollaron al cuadro local en la primera parte, pero no pudieron mantener el resultado en el complemento ante un equipo local que lo buscó con más intensidad.
Las esperanzas de la afición y el equipo venezolano presentes en el Stade d´ Honneur del Salon de-Provence, Francia, duraron poco más de 50 minutos, los mismos que tardó «les blues» en sacudirse la presión de los criollos y afianzar su juego para igualar la contienda primero, y adelantarse después.
Batista paró sobre el césped al once mejor once que tenía. Aquel que cautivó durante toda la fase inicial y en semifinales por sus grandes actuaciones defensivas, jugadas de fantasías en el mediocampo y conexiones ofensivas que los lleva a generar constante peligro en el área rival.
Rodríguez; Aramburu, Ferro, Paz, Conde; Segovia, Chacón; Ruíz, de Santis, Romero; y Pérez conformaron un permeable 4-2-3-1, el cual a lo largo del partido fue mutando en 4-4-2 o 4-3-1-2 que los hizo verse muy superiores a los hombres de Bernard Diomède, exjugador campeón del mundo en Francia 98 con la selección mayor y actual técnico del equipo juvenil.
Diomède salió con un esquema idéntico sobre el papel, pero muy diferente en funcionamiento una vez iniciado el juego, pues la defensa local estuvo desconectada del mediocampo toda la primera parte, lo que le permitió a los nacionales encontrar mucho espacio a espaldas de los volantes. Ideal para meter pases largos o centros en profundidad que se convirtieran en puñales para los hoy vestidos con camiseta blanca.
De esta manera fue que llegó la apertura del marcador. Emerson Ruíz, una de las figuras de Venezuela, metió una pelota larga al área para que Jeriel de Santis controlara con dos defensas encima, rematara con el portero en frente y le quedara la pelota muerta a un Telasco Segovia que llegó al rescate para sacar un furioso disparo que se internaba en las redes al minuto 8 para el 0-1.
Francia tenía en Aouchiche, Akliouche y Mara sus mejores opciones ofensivas. De hecho, en varias oportunidades lograron poner en peligro esa ventaja vinotinto, pero sus disparos se marchaban desviados, eran detenidos por el portero Rodríguez o que se estrellara en el poste.
Venezuela gozó de múltiples chances para aumentar la diferencia en los pies de Daniel Pérez, Segovia o de Santis, pero las que no terminaban en fuera de juego (se mostraban un ansiosos de cara a gol) eran detenidas por Melvin Zinga.
Todo parecía controlado para los nacionales hasta ese momento. El complemento fue una historia diferente. Mbuku, Sildillia y Richardson entraron al campo por parte de Francia en un triple cambio para mejorar cada zona del campo y estabilizar al conjunto blues.
Movimiento que le resultó a Diomède, puesto que ya al 53 Akliouche había puesto las tablas en el resultado al aprovechar un despiste de la zaga venezolana para internarse en el área rival y rematar cómodamente a portería una pelota que entró pidiendo permiso.
Para ese momento, ya Venezuela estaba fuera del partido. El elenco criollo estaba más concentrado en discutir la arbitra central por sus, más que polémicas, decisiones que beneficiaban claramente a Francia. Una prueba de ello se puede observar en las ocho tarjetas amarillas con las que acabó la Vinotinto, además del expulsado Ruíz por doble amonestación.
La frustración era evidente tanto en los suplentes como en los jugadores de campo y el cuerpo técnico de Batista, quien le aplaudía sarcásticamente a la juez cada falta pitada en favor de Francia. En cambio, los locales siguieron enfocados en lo suyo, terminar de sellar la remontada.
Hecho que logró en el 79 gracias a otra desatención defensiva en un saque lateral de Sildillia que le cayó en los pies a Mbuku, se perfiló para la zurda y remató ajustado al palo izquierdo de Rodríguez para vencer su resistencia y gritar el 2-1.
Matías Lacava era quien tendría la última oportunidad de empate para Venezuela sobre el descuento al tener una pelota casi sobre el punto penal dejada por de Santis, pero su remate se fue desviado por la fuerte entrada de Nianzou en su intento de impedir la igualdad.
Sin más, llegaron los tres pitidos finales. Francia conquistó su 13er Maurice Revello y sigue siendo el equipo más ganador del torneo, mientras que la Vinotinto se quedó con un amargo subcampeonato en su primera participación en el certamen antiguamente conocido como las «Esperanzas de Toulon».
También la pena destacar la actuación del volante del Deportivo Lara, Telasco Segovia, quien dejó grandes destellos de calidad técnica durante la competencia que lo llevaron a alzarse con el premio al Mejor Jugador del torneo.
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