El escenario fue el estadio Monumental Simón Bolívar, en Caracas, uno de los más grandes de América Latina que alberga alrededor de 50.000 personas para conciertos, donde Andrea Bocelli, el reconocido tenor italiano cautivó con su hermosa voz a los asistentes.
Su entrada tuvo lugar hora y media después de lo pautado según la agenda del día, cuando el público lo vio llegar con un pulcro smokin negro brillante, si el retraso en la entrada del artista causó alguna molestia, esta fue aplacada de inmediato por «La Donna è mobile» y la «Cavallería rusticana», que le salió al paso como segundo tema.
Andrea Bocelli y un digno espectáculo
Bocelli alterna su participación con una violinista que interpreta una versión de Pajarillo que, realmente, genera admiración en el público, cuando vuelve para interpretar uno de los más esperados de la noche: «Funiculí Funiculá», que recibe de compañía la entusiasta voz de los presentes como coro.
Y no es el único tema en el que esto ocurre, casi todas las canciones que trajo Bocelli, recordadas, esperadas, llevan a los presentes a expresar que ni un solo dólar de la gran inversión que hicieron -de hasta 600 dólares- para pasar una noche de ensueño, fue perdido.
Todas y cada una de las canciones que popularizaron a este espectacular tenor fueron escuchadas la noche de este inolvidable 22 de febrero.
Un momento a destacar fue la participación de la cantante venezolana, Nella, la Orquesta Sinfónica y el coro Simón Bolívar quienes le acompañaron en el dúo «Vivo por ella», arrancando los aplausos y la gran admiración del público por el gran tenor italiano que no defraudó a sus fanáticos con su potente voz.
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