Abuelitos internos y pacientes ambulantes de la Unidad Geriátrica Marcos Serres Padilla, ubicado en la parroquia Las Cocuizas del municipio Maturín, tuvieron compartir como parte del programa que lleva adelante la Pastoral Social de la Iglesia Santo Domingo de Guzmán.
Así lo señaló Luisa Renautt, en representación de la Iglesia en coordinación con Inass para planificar las misas que se efectúan en el recinto el último jueves de cada mes.
Señaló que las actividades incluyen oraciones y compartir con los adultos mayores que se encuentran internados en el geriátrico, con el objetivo de brindar alegría a los internos y pacientes que acuden diariamente al lugar.
«El día de hoy estuvimos varios grupos de apostolado de la Iglesia, junto a representantes de la Escuela de Música José Gabriel Núñez Romberg, y quisimos aprovechar este inicio de cuaresma para venir a brindar este momento de atender a nuestros viejitos, es una actividad que se realiza mensualmente».
Agregó que para el mes próximo en vista de que será cuaresma y corresponde realizar los víacrucis, no estarán asistiendo al geriátrico, sino que efectuarán el recorrido por las distintas calles de las Cocuizas y dentro del ancianato conjuntamente con la Iglesia, el día 21 de marzo a las 9:00 am.
Por su parte, la asistente de dirección, Paola Cedeño, manifestó que el recinto atiende a 45 adultos mayores y algunos ambulatorios que asisten diariamente para recibir atención y agradecen a la iglesia Santo Domingo de Guzmán el hecho de compartir, promover la calidad de vida de los adultos mayores.
«Hay 32 mujeres y el resto son hombres, que se sienten valorados y tomados en cuenta con este tipo de actividades, la atención es diaria y de calidad, los estimulamos a que se sientan en su hogar, queridos y valorados, esto mejora su calidad de vida», dijo Cedeño.
Agregó que es una lucha constante, debido a que algunos se sienten deprimidos y hay que atenderlos de manera especial para sacarlos de ese cuadro. «La lucha es diaria, hay algunos que amanecen deprimidos, para ello contamos con un médico psiquiatra que se encarga de su medicamento cuando están deprimidos, contamos con la gerontólogo, y el día que amanecen así, los aislamos, y conversamos con ellos para saber qué les afecta pasa ir mejorando», expresó.
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