La Universidad Pedagógica Experimental Libertador-Instituto Pedagógico de Maturín “Antonio Lira Alcalá” no está segura contra la delincuencia, debido a que los amigos de lo ajeno ingresan en grupos, de noche e inclusive a plena luz del día, armados con cizallas y otras herramientas que les permiten acceder a los distintos espacios, según denuncian las autoridades del recinto.
El jefe de la unidad de desarrollo y mantenimiento de la planta física de la UPEL-IPM, ingeniero Domingo Salazar informó que desde el pasado 7 de septiembre inició la nueva ola de robos cuyo último episodio se registró la madrugada del martes 26.
“Desde entonces han resultado afectadas las oficinas de dirección, subdirección de docencia, planificación y programación presupuestaria, secretaría, laboratorios de química 1 y 2, y los gimnasios, entre otras áreas”.
Delincuencia destruye todo a su paso
Durante la inspección realizada por el ingeniero Salazar, junto al supervisor de seguridad, Jesús López, se observó que algunas de las puertas han sido violentadas, protecciones de hierro cortadas, ausencia de ventanas, vidrios rotos, tableros abiertos, cables cortados y muebles desechos, “ya no se conforman con robar, sino que además destruyen todo lo que está a su paso».
Autoridades denunciaron destrozos en el Pedagógico
La decana/directora de la Universidad, doctora Neida Montiel, acudió en horas de la tarde de este martes, en compañía del jefe de la Unidad, al Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc), para hacer la denuncia correspondiente. La misma tarde efectivos del Cicpc se acercaron a las instalaciones del Instituto Pedagógico de Maturín para corroborar los hechos e iniciar las investigaciones pertinentes.
Se espera que los organismos de seguridad brinden mayor seguridad a los universitarios y las instalaciones para que la Upel pueda recuperar sus espacios y brindar educación de calidad a los futuros docentes del país.
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