Representantes de Protección Civil y Administración de Desastres (PCAD) otorgaron certificados a un grupo de 34 personas del equipo Cáritas Maturín, tras haber culminado la primera cohorte del curso de voluntarios Brigadistas de Socorro que se llevó acabo en las instalaciones de esta Pastoral Social.
Al respecto, el director regional de Cáritas, presbítero Manuel Gerónimo Sifontes, mencionó que «la Diócesis de Maturín, en nombre del señor Obispo Enrique Pérez Lavado y mi persona como director de Cáritas Maturín, respondiendo a la iniciativa de la Campaña Compartir 2023, sobre la prevención de riesgos y desastres, ha logrado la formación, capacitación y graduación de la primera cohorte de Brigadistas de Socorro de Cáritas Maturín».
Aliados
Añadió que los participantes fueron formados por los especialistas de Protección civil y «quedan desde hoy asumidos como voluntarios y Aliados de Protección civil del estado Monagas».
Precisó el presbítero que la formación se realizó desde el pasado mes de junio hasta este 25 de agosto, periodo en el cual estuvieron recibiendo cursos básicos para el ejercicio de esta responsabilidad. «El compromiso es estar siempre prestos como servidores públicos y de seguir formándose con nuevos cursos, cada vez más especializados. Seguiremos formando ahora en el resto de los Archiprestazgos de la Diócesis de Maturín. Norte, Sur, Este y Oeste. La meta es llegar a tener 150 Brigadistas disponibles y capacitados», aseveró Sifontes.
Apoyar y acompañar
El padre recalcó además que Cáritas tiene una responsabilidad social para acompañar a las personas en estado vulnerable, por lo que desde la Conferencia Episcopal se manejó el tema de los riesgos a los que se ve expuestos todos los venezolanos, tal como ocurrió en Las Tejerías, Maracay, estado Aragua, razón por la cual se comenzó a construir y asumir el reto de asumir compromiso cristiano y de fe de parte de la iglesia como parte de la justicia social, ser parte de la solución.
A nivel nacional se espera formar equipos de voluntarios mayores de 15 años y adultos mayores dispuestos a formarse, y especializarse en diversas áreas y de acuerdo al compromiso.
Entre los temas se preparan en materia de incendio, tránsito. En cuanto al contenido programático, los participantes se formaron en: Signos vitales, quemaduras, fracturas, heridas, hemorragias, bioseguridad, emergencias, urgencias, hora dorada, maniobra de Heinrich, reanimación cardiopulmonar básico, plan local de emergencia, inmovilización y traslado de lesionados, los cuales serán replicados en Caripe, La Toscana, Aragua y San Antonio posteriormente.
Para culminar la fase de aprendizaje, el grupo realizó un simulacro de terremotos con víctimas a las que se debía hacer las revisiones respectivas, así como el correcto traslado de heridos, evacuación de los presentes.
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