Han pasado 34 años de aquel 09 de agosto de 1988, cuando el actor y comediante Ramón Valdez dio su último suspiro de vida y partió hacia otro plano. La causa de su muerte de debió a un cáncer de estómago que padecía producto de su hábito de fumar.
Ramón Valdez, nació en Ciudad de México el 02 de septiembre de 1923. Su primera aparición en el cine fue en la película Calabacitas tiernas en 1940, a partir de allí fueron otras tantas de las actuaciones donde fue escalando puesto hasta llegar a lo que sería su gran personaje de la mano de Roberto Gómez Bolaños, fallecido el 28 de noviembre de 2014, con el programa Chespirito, interpretando a Don Ramón, en el Chavo del Ocho, un hombre humilde y de bajos recursos, viudo y con una hija llamada La Chilindrina que crio solo debido a la muerte prematura de su esposa en la ficción.
Un personaje que demuestra la realidad de un hombre que se encarga de su hija, con un carácter bastante peculiar pero con un gran corazón, capaz de ayudar a otros cuando lo necesitan.
Pero el actor no solo le dio vida en Chespirito a este personaje, sino que al momento de que Carlos Villagrán, quien interpretó a Kiko en la serie saliera del programa de manera abrupta, Ramón Valdez debido a su gran amistad también se retiro y ambos llegaron a Venezuela probar suerte con una serie distinta, pero con la misma gracia que en el Chavo de Ocho, sin embargo, el éxito no fue el esperado.
En 1982 protagonizó la serie Federrico también en Venezuela con Carlos Villagrán. Seis años después, en 1988, trabajó nuevamente con este último mencionado en ¡Ah qué Kiko!. Sin embargo, su estado de salud era delicado pues le había sido detectado cáncer de estómago.
Ramón Valdez falleció en a los 64 años de edad
Lamentablemente, el actor murió en México a los 64 años de edad dejando un inmenso vacío en el mundo del arte. Ramón Valdés tenía una adicción fuerte al tabaco y solía fumar incluso durante las grabaciones de los diferentes programas de Chespirito, lo que le causó cáncer de estómago, que fue detectado a inicios de los años 80. Se dijo en su momento que el presidente de Televisa Emilio Azcárraga, había prohibido a todo el personal fumar dentro de las instalaciones pero se lo permitió a Valdés, debido a su estrecha amistad. Alrededor de 1985, fue sometido a una cirugía del estómago para reducirlo a la tercera parte; sin embargo ya era demasiado tarde: el cáncer había hecho metástasis en su médula espinal. Por ese motivo, médicamente fue desahuciado y recibió solo ciertos cuidados paliativos en los siguientes tres años de su vida.
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