China rechazó hoy que hubiese apoyado o dado un consentimiento tácito al golpe de Estado en Birmania del pasado lunes y reiteró que espera que todas las partes resuelvan sus diferencias e impulsen la estabilidad.
«Esas teorías no son ciertas, deseamos que todas las partes en Myanmar puedan resolver sus diferencias y defiendan la estabilidad política y social», dijo Wang Wenbin, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, preguntado sobre el supuesto apoyo de China.
Wang señaló que la comunidad internacional «debe crear un buen entorno externo» para que Birmania pueda «resolver sus conflictos de manera apropiada».
«China está perpleja y conmocionada por la filtración de un documento interno que está debatiéndose en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas», dijo el portavoz, en referencia a la filtración a los medios del borrador de resolución que no aprobó ayer el máximo órgano de la ONU por el bloqueo de China y Rusia.
Ese borrador, impulsado por el Reino Unido, condenaba el golpe e instaba a los militares a respetar la ley y los derechos humanos y a poner en libertad inmediata a los detenidos.
El ministro de Exteriores chino, Wang Yi, visitó a mediados de enero Birmania donde se entrevistó con el jefe militar, Min Aung Hlaing, que perpetró el golpe de Estado, y también con la líder de facto del Ejecutivo, Aung San Suu Kyi, que fue detenida tras la asonada y continúa arrestada.
China ha reiterado desde el pasado lunes que confía en que todas las partes en Birmania «resuelvan correctamente sus diferencias de acuerdo con la Constitución y la ley», al tiempo que anunció que está negociando con todos los sectores implicados.
«Cualquier movimiento de la comunidad internacional debe ayudar a la estabilidad política y social de Birmania, a promover una solución pacífica y evitar más conflicto», recalcó el portavoz.